La Regla 2 Minuto de oraciones del consagrado
Adyacente con mi dolor, aunque leve, con aquella angustia mortal que te hizo sudar sangre a la sola memoria de nuestros pecados.Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos y para mostrarte publicidad relacionada con sus preferencias en pulvínulo a un perfil elaborado a partir de tus hábi